Cuando hay un incendio en una vivienda., ¿cómo se comportan las ventanas de PVC?

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Como comentario añadido a lo ya comentado, decir que las ventanas de pvc no serían ni más tóxicas ni más peligrosas que cualquier juguete de plástico de un niño, que cualquier utensilio o recipiente de plastico de los que habitualmente se utilizan en la cocina y cualquier material plastico de que se componga alguno de los elementos de tu vivienda. Al contrario que todos estos, los perfiles de pvc de las ventanas están tratados para ser autoextinguibles ya que la estricta normativa europea, así lo exige. En el caso de los "otros" materiales plasticos de la vivienda, raramente suelen estar sujetos a esa normativa y más aún teniendo en cuenta que su procedencia mayoritaria es de China ó paises fuera de la UE.

Saludos

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La ventana de PVC es un material autoextinguible que cumple plenamente con todas las garantías de la reglamentación vigente, según la norma Une 53.315. Así, se trata de un material clasificado como M1, que corresponde a un material no inflamable o difícilmente inflamable. El PVC solo sigue ardiendo si se mantiene una llama aplicada en él; al retirarle la llama se extingue inmediatamente. No puede en ningún caso ser el origen de un incendio ni tampoco constituir un factor agravante del mismo. Son necesarias temperaturas entre 300 y 400 °C para provocar la ignición del PVC, con un índice de oxígeno del 50%. La madera, por citar un ejemplo, presenta una temperatura de ignición menor, arde ya a 260º y sólo necesita un índice de aportación de oxígeno del 21%.

Las ventanas de PVC están formadas por un 43% de petróleo y un 57% de cloro, que se obtiene de la sal común. Este cloro le otorga al material la propiedad de resistir de forma natural a la inflamación y, por tanto, no propaga el fuego en caso de un incendio.
La acción del calor sobre el PVC origina una descomposición de los siguientes compuestos: dióxido de carbono (CO2) de muy baja toxicidad, monóxido de carbono (CO) y gas clorhídrico (HCI), con formación de agua que se elimina por la circulación de aire. Al ser soluble en agua es rápidamente extinguible. También se produce una rápida condensación en contacto con una zona fría. Al principio de la combustión, el ácido clorhídrico, que es un gas irritante, se detecta rápidamente a través del olfato. Por tanto, constituye una alarma del fuego, lo que conduce a una detección precoz. Asimismo, los gases de la combustión del PVC no representan una amenaza para la capa de ozono ni contribuyen al calentamiento global más que otros materiales combustibles.

En caso de un incendio la generación de dioxinas no depende de la presencia de PVC. Las cantidades de estos contaminantes son muy inferiores a las teóricas en los ensayos de laboratorio y no representan una amenaza importante para la población ni para el medio ambiente.

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Durante un incendio, como todas las cosas, todo queda destruido total o parcialmente. Las ventanas de PVC no arden solas, no se derriten, no emiten gases tóxicos, ni nada por el estilo. Sólo se ven afectadas si el fuego incide directamente sobre ellas, descomponiéndose mientras la llama le afecte directamente. Sobre el banco de ensayos, siempre resisten mejor que las de aluminio, pues éstas, simplemente con el calor se deforman totalmente y se hacen inservibles, mucho más pronto que las ventanas de PVC.

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